El acné se ha apoderado del 20% de los adultos de entre 20 y 30 años. Esta condición generalmente se encuentra en la adolescencia. En las personas que padecen este problema en la edad adulta, los brotes no comienzan hasta los veinte años. Las causas de esta afección varían y pueden ser cualquiera o una combinación de las siguientes afecciones.
Estrés. Hasta hace unos años, el estrés por acné se consideraba solo un mito, pero a lo largo de los años, los investigadores están comenzando a comprender la correlación entre el estrés y el acné. Para los adultos que sufren de acné, se considera que el estrés es la principal causa de erupciones pospúberes. Cuando las personas experimentan momentos estresantes en sus vidas, el cerebro
La obstrucción de los poros también se debe al desequilibrio hormonal y las secreciones de grasa. Estos índices son contribuyentes conocidos a los brotes de acné.
Desequilibrios hormonales. Afectan principalmente al sexo femenino y son una de las causas del acné en los adultos. Su aparición se observa durante el ciclo menstrual de una mujer o como resultado del embarazo puede provocar brotes de acné. En muy pocos casos también se han informado episodios mensuales de acné en hombres adultos. Aunque los hombres obviamente no menstrúan, se cree que los hombres pueden tener ciclos hormonales similares a los de las mujeres.
Consumo de café. Hoy en día, muchas personas consumen mucho café sin darse cuenta de que la cafeína en el café y el té promueve la producción de cortisol, que también se conoce como la hormona del estrés. Como se mencionó, se sabe que los desequilibrios hormonales contribuyen al acné adulto.
De fumar. Debido a los cigarrillos, muchos productos químicos se introducirán en el cuerpo humano y limitarán la circulación sanguínea a las células de la piel, inhibiendo la capacidad de la piel para sanar y regenerarse. Las toxinas que se liberan en el humo del cigarrillo pueden obstruir los poros y promover el crecimiento de bacterias en los poros, todo lo cual contribuye al acné adulto.
Herencia. Investigaciones recientes han demostrado que las personas son más propensas a sufrir acné en los adultos si tienen antecedentes familiares de personas que padecen acné en adultos.
Productos cosméticos. Algunos productos son muy pesados o grasosos. Debido a esto, los poros de la piel se obstruirán, atrapando bacterias, suciedad y aceites, lo que provocará acné en los adultos. Cubrir el acné con maquillaje puede empeorar la afección.