Esta condición es una de las afecciones cutáneas más comunes, ya que afecta al 80% de la población en la adolescencia, adultos hasta los 40 años y mujeres embarazadas. Generalmente se ve agravada por la piel grasa, pero ningún tipo de piel es inmune. Debido al exceso de grasa, los poros se obstruyen y generan manchas blancas y negras o se convierten en acné quístico que se inflama o infecta. Estos quistes pueden romperse y causar cicatrices.
Los efectos de los defectos, leves o extremos, pueden durar más de lo que muchas personas creen. Desde las primeras impresiones hasta los problemas psicológicos personales y la salud de su piel, el acné es un desafío importante para muchos. Afortunadamente, hay mucha información disponible sobre el tema y muchas opciones de tratamiento. Cuando comprenda qué causa el acné y cómo la piel se renueva, estará a punto de abordar problemas específicos de la piel.
El acné puede ser causado por varias cosas, algunas de las cuales son la genética, el equilibrio hormonal del cuerpo, cambios en los niveles hormonales, irritación de la piel, estrés, glándulas sebáceas hiperactivas, acumulación de células muertas en la superficie de la piel, bacterias en los poros, uso de ciertos medicamentos e incluso exposición a sustancias químicas. La mayoría de los tipos de acné se pueden tratar.
Esta afección se puede tratar de varias formas. Algunos de estos son: cremas, lociones, geles y soluciones de venta libre (OTC). Algunos están diseñados para tratar las imperfecciones cutáneas existentes, otros para prevenirlos y otros para hacer ambas cosas.
La mayoría de los productos para el tratamiento del acné están hechos para reducir la aglomeración anormal de células en los folículos, ayudar a controlar el aumento de la producción de grasa, controlar y combatir las bacterias y reducir y aliviar la inflamación. Las personas deben ser conscientes de que no todos estos productos tienen efectos positivos. Los ingredientes que contienen y las concentraciones en las que se formulan son fundamentales para la eficacia de cualquier producto. Algunos de los ingredientes clave eficaces en los tratamientos del acné incluyen:
- Peróxido de benzoilo. Su función es matar la bacteria P. acnes, reduciendo así la producción de aceite. Tiene efectos positivos sobre las bacterias porque es un oxidante fuerte. Sin embargo, incluso si ayuda a tu piel a controlar la producción de grasa, puede provocar sequedad, así que cuando optes por tratamientos para el acné que contengan este ingrediente, asegúrate de que también contengan humectantes no comedogénicos para contrarrestar la sequedad. .
- Resorcinol. Su función es ayudar a que los poros se desbloqueen para eliminar los puntos negros y los puntos blancos. Ácido salicílico: funciona como el resorcinol, pero ayuda a evitar que las células que recubren los folículos pilosos se desprendan.
- Triclosán. Por sus propiedades antibacterianas logran controlar el nivel de P. acnes. Exfolia para promover la renovación celular normal de la piel mientras previene el apiñamiento